1-
Roy Barreras le confesó a Cecilia Orozco: "Colombia es víctima de la
maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron
resolver ese problema". Según esa confesión escalofriante del primer
defensor de la paz, y de uno de los firmantes de la paz en la Habana a
nombre del Gobierno, Santos firmó con las Farc, es decir, con el
narcotráfico, un acuerdo de paz sin resolver el problema del
narcotráfico. Y el narcotráfico es reconocido hoy como el enemigo número
uno de Colombia y del mundo. Mata lentamente a 315 millones de
drogadictos y mata anualmente a 250.000 drogadictos en todo el mundo.
Siendo así y por sustracción de materia no existe el acuerdo de paz, ni
la JEP derivada de un acuerdo de paz inexistente, ni la Ley para la JEP
inexistente, ni las objeciones sobre una ley inexistente, ni el debate
en el congreso sobre unas objeciones inexistentes.
2- Roy Barreras, médico y senador, y firmante de la paz en la Habana, hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son una solución para el narcotráfico”. La revelación de Roy Barreras es coherente con la cantidad de beneficios que Colombia le confiere al narcotráfico: acuerdo de paz Santos-narcotráfico sin resolver el problema del narcotráfico; ninguna fumigación con Glifosato; todos los congresistas de la izquierda radical opuestos a cualquier reforma del acuerdo de paz y la JEP; todos los senadores y representantes de la izquierda radical y la JEP y la Corte Constitucional opuestos a la extradición.
3-Roy Barreras, médico y senador, y primer defensor del acuerdo de paz, hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son una solución para el narcotráfico”. Roy Barreras reconoce que ni el acuerdo de paz Santos-narcotráfico ni la JEP constituye una amenaza para el narcotráfico. Y las mayorías de la izquierda radical en el senado casi impiden la extradición de narcos de las guerrillas comunistas y de terceros colados que le pagaron a Marlon Marín para que no los extraditaran. ¿Por qué Colombia desafía de esa manera tan arrogante y torpe al pte Trump que defiende ahincadamente a 1.500 millones de víctimas directas e indirectas del narcotráfico?
2- Roy Barreras, médico y senador, y firmante de la paz en la Habana, hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son una solución para el narcotráfico”. La revelación de Roy Barreras es coherente con la cantidad de beneficios que Colombia le confiere al narcotráfico: acuerdo de paz Santos-narcotráfico sin resolver el problema del narcotráfico; ninguna fumigación con Glifosato; todos los congresistas de la izquierda radical opuestos a cualquier reforma del acuerdo de paz y la JEP; todos los senadores y representantes de la izquierda radical y la JEP y la Corte Constitucional opuestos a la extradición.
3-Roy Barreras, médico y senador, y primer defensor del acuerdo de paz, hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son una solución para el narcotráfico”. Roy Barreras reconoce que ni el acuerdo de paz Santos-narcotráfico ni la JEP constituye una amenaza para el narcotráfico. Y las mayorías de la izquierda radical en el senado casi impiden la extradición de narcos de las guerrillas comunistas y de terceros colados que le pagaron a Marlon Marín para que no los extraditaran. ¿Por qué Colombia desafía de esa manera tan arrogante y torpe al pte Trump que defiende ahincadamente a 1.500 millones de víctimas directas e indirectas del narcotráfico?
4-
Roy Barreras, médico y senador, y primer defensor del acuerdo de paz,
hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es
víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la
JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza
ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son
una solución para el narcotráfico”. Los senadores de la izquierda
radical, mansurrones y dóciles, acicateados por el médico Roy Barreras,
casi impiden la extradición y consecuentemente y por poco resultan
culpables o mínimamente corresponsables penalmente, con los magistrados
de la JEP y la CC, por la muerte anual por sobredosis de 250.000
drogadictos, pues, esos senadores y esos magistrados aumentan la coca y
la cocaína, oponiéndose a la fumigación con Glifosato y a la
extradición.
5- Roy Barreras, defensor del acuerdo de paz, hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son una solución para el narcotráfico”. Desgraciadamente los hechos que lamentamos hoy y lamentaremos mañana confirman las revelaciones del médico Roy Barreras: 250.000 a 500.000h de coca; 1.500 a 3.000t de cocaína; 315 a 630m de drogadictos; 250.000 a 500.000 muertes anuales por sobredosis; 1.500 a 3.000 millones de víctimas del narcotráfico; 20 a 40% de la humanidad -7.550m- amenazada por el narcotráfico colombiano. Colombia convertida en el país más perseguido, temido y odiado del mundo, por obra del narcotráfico global.
6- El médico y senador Roy Barreras es el autor de los mayores contrasentidos de la historia colombiana: a nombre del Gobierno firmó la paz con el grupo narcotraficante de las Farc en la Habana, y luego le dijo a Cecilia Orozco de El Espectador que ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver el problema del narcotráfico global. El médico Roy Barreras firmó un acuerdo de paz con el narcotráfico colombiano, pero, no resolvió el problema del narcotráfico global. Le abrió el estómago al paciente, pero no le extirpo el tumor. Le destapó el pecho al enfermo y no le cambió la válvula mitral. Le puso anestesia general al sacerdote y no le drenó el absceso perianal. En suma: firmó la paz con los narcos prescindiendo del narcotráfico o principal enemigo. Y para redondear la faena tilda de amigos de la guerra o enemigos de la paz a quienes se atrevan a criticar ese sartal de errores y contradicciones.
5- Roy Barreras, defensor del acuerdo de paz, hizo esta revelación escalofriante a Cecilia Orozco: “Colombia es víctima de la maldición del narcotráfico y ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver ese problema global. La JEP tampoco amenaza ese instrumento -tampoco amenaza al narcotráfico- ni las objeciones son una solución para el narcotráfico”. Desgraciadamente los hechos que lamentamos hoy y lamentaremos mañana confirman las revelaciones del médico Roy Barreras: 250.000 a 500.000h de coca; 1.500 a 3.000t de cocaína; 315 a 630m de drogadictos; 250.000 a 500.000 muertes anuales por sobredosis; 1.500 a 3.000 millones de víctimas del narcotráfico; 20 a 40% de la humanidad -7.550m- amenazada por el narcotráfico colombiano. Colombia convertida en el país más perseguido, temido y odiado del mundo, por obra del narcotráfico global.
6- El médico y senador Roy Barreras es el autor de los mayores contrasentidos de la historia colombiana: a nombre del Gobierno firmó la paz con el grupo narcotraficante de las Farc en la Habana, y luego le dijo a Cecilia Orozco de El Espectador que ni el Acuerdo de Paz ni la JEP pretendieron resolver el problema del narcotráfico global. El médico Roy Barreras firmó un acuerdo de paz con el narcotráfico colombiano, pero, no resolvió el problema del narcotráfico global. Le abrió el estómago al paciente, pero no le extirpo el tumor. Le destapó el pecho al enfermo y no le cambió la válvula mitral. Le puso anestesia general al sacerdote y no le drenó el absceso perianal. En suma: firmó la paz con los narcos prescindiendo del narcotráfico o principal enemigo. Y para redondear la faena tilda de amigos de la guerra o enemigos de la paz a quienes se atrevan a criticar ese sartal de errores y contradicciones.
7- Siendo así y por sustracción de materia no existe un acuerdo de paz, sino una desmovilización parcial de guerrilleros comunistas, pero la izquierda radical le presenta al país y al mundo un acuerdo de paz real y verdadero, firmado por Juan Manuel Santos y Rodrigo Londoño. Sin embargo, la realidad social del país, de carne y hueso, no se corresponde con la realidad social y de papel de ese acuerdo, pues, las Farc sólo cambiaron de nombre: de haber sido frentes armados y narcotraficantes, están convertidos en partido político y disidencias armadas y narcotraficantes. Las diferencias entre las realidades de papel y las realidades de carne y hueso, son abismales. Por eso es imposible que la democracia liberal y la izquierda radical logren aceptarse mutuamente, sin cambiar el acuerdo de paz ficticio, para la mitad del país, por un acuerdo de paz real y verdadero, para el 100 x 100 del país.
Comentarios
Publicar un comentario