1- Lo primero que debe hacer el Gobierno ahora es identificar al enemigo. Después de identificar al enemigo debe determinar con absoluta claridad, de qué manera va a lidiar a ese enemigo. Y luego debe decidir si va a librar esa batalla en solitario o va a pedir ayuda internacional. El gobierno anterior se equivocó al definir al enemigo. Acordó la paz con 12 narcotraficantes globales, creyendo que estaba acordando la paz con 12 jefes guerrilleros locales y comunistas.
2) Hechos reales y comprobables: en 1983, Manuel Marulanda Vélez, presintiendo el fracaso mundial del comunismo, ordenó a los guerrilleros cambiar las armas por la política; 2) la China cambió al comunismo por la democracia liberal; 3) Rusia cambió en 1989 el comunismo por la democracia liberal; 4) Fidel y Lula crearon el Foro de Sao Paulo en 1990 para no dejar morir al comunismo y fracasaron; 5) el comunismo fracasó también en Cuba y Venezuela; 6) el Che y Fidel son dos comunistas fracasados; 7) las guerrillas comunistas fracasaron.
3) El fracaso estrepitoso y mundial del comunismo, ocurrido entre 1983 y 2018, produjo cambios dramáticos en las estructuras guerrilleras colombianas, al pasar esas guerrillas marxistas-leninistas-estalinistas-castristas y chavistas locales, a narcotraficantes globales proveedores de dinero del Foro de Sao Paulo, pues, perdieron el apoyo económico y político de China, Rusia, Cuba y Venezuela… y perdieron la tutela personal de Fidel, el Che y Chávez.
4) Estos hechos, conocidos y aceptados mundialmente, fueron desechados, política e irresponsablemente, por Juan Manuel Santos, pues, muy orondo acordó un acuerdo de paz con 12 narcotraficantes colombianos y globales, haciéndole creer a 45 millones de pendejos y al mundo entero, que estaba acordando la paz con las guerrillas comunistas colombianas, cuando esas habían desaparecido como tales y se habían transformado en narcotraficantes, durante los 35 años en que se produjo el derrumbamiento dramático y estrepitoso del comunismo mundial.
5- Si Santos, le dice la verdad en Colombia a los colombianos y al mundo, de que estaba acordando la paz con 12 narcotraficantes colombianos y globales, había recibido la ayuda directa de los EEUU y del mundo, puesto que, los narcos colombianos y globales están acabando con 315 millones de drogadictos; matan cada año a 250.000 drogadictos con sobredosis; hunden en la desesperación a 630 millones de padres; y a 555 millones de hermanos, esposas, esposos e hijos, esto es, los narcotraficantes colombianos son los verdugos de 1.500 millones de personas en el mundo.
6- Los colombianos, patriotas, sin distingo de ninguna naturaleza, debemos rodear y apoyar solidariamente al Gobierno del presidente Iván Duque, en su cruzada para vencer al narcotráfico colombiano y global. Sin embargo, todos unidos en una sola voz, debemos exigirle que identifique con total y absoluta claridad al enemigo, pues, el enemigo es el narcotráfico colombiano y global. Identificarlo con absoluta claridad es crucial. Puesto que, no es igual combatir en solitario a una guerrilla comunista que ya no existe que combatir con todos los gobiernos del mundo al narcotráfico global.
7- Contra un enemigo de toda la humanidad, o contra un enemigo global, cómo es el narcotráfico colombiano, es preciso acometer una batalla consensuada entre todos los países del mundo, ya que, a nombre de todos los países del planeta, deben participar como contendientes en esa batalla, los congresos, los gobiernos, los fiscales y los jueces; asimismo los Servicios de Inteligencia, de policía y de salud pública. Desde luego esto debe tener como sustento unas negociaciones previas con todos los países. Negociaciones que inexorablemente deben consumar los mejores diplomáticos de cada país. Andrés Pastrana y Noemí Sanín harían bien esa tarea
8- Si el Gobierno del presidente Iván Duque reconoce que el Estado está enfrentado al narcotráfico colombiano y global, esto es, a la red del narcotráfico mundial, tiene que reconocer asimismo que no puede negociar con los grupos narcotraficantes, aunque se vistan como militares y aunque lleven la divisa política de las guerrillas comunistas. Del mismo modo tiene que aceptar ya la ayuda del mundo, en economía, justicia, Inteligencia, FFAA y salud pública. Porque al romper negociaciones con los grupos narcotraficantes, antes guerrillas comunistas, enfurecidos incrementarán los actos suicidas de terrorismo y querrán acabar con el país usando demencialmente camionetas bombas.